martes, 21 de agosto de 2012

Baloncesto


¿Última derrota de Scariolo?

Fin del contrato. El 12 de Agosto Sergio Scariolo dejaba de ser entrenador de la Selección Española de baloncesto. La fecha coincidía con la final olímpica España- EE.UU., disputada en el North Greenwich Arena de Londres, y donde España caía derrotada 100-107.

Felicitaciones y Rumores. Tras las más que merecidas felicitaciones por el juego desplegado por parte del equipo español (porque perdimos, pero fue una derrota con sabor a victoria. Imprescindible ver el partido para comprender la sensación de “plata con sabor a oro”), las preguntas sobre su futuro no se hicieron esperar. “It’s not time”, repetía a medios españoles y extranjeros indistintamente, pero si los rumores son ciertos, éste habría sido su último partido al frente de la selección.
Éxito en el juego. Sobre el papel, el éxito de Scariolo ha sido rotundo; oro en su debut como entrenador en el Europeo de Polonia en 2009, oro en el Europeo de Lituania en 2011, y plata en los JJ.OO. de Londres en 2012. Sólo en el Mundial de Turquía de 2010 fuimos eliminados obteniendo un inesperado sexto puesto.

Fracaso en el vestuario. El juego en la cancha no ha sido siempre el esperado. Parece que sólo durante las finales los jugadores se han sentido realmente motivados y han impuesto su juego soberano.
¿Se debe esta inestabilidad en el juego a la relación jugadores- entrenador? Los rumores sobre fricciones dentro del vestuario han estado siempre presentes. Recordemos en Polonia a Marc Gasol reprochando la decisión de conceder la canasta decisiva a Sergio Llull, “el último chico en llegar”, o la incomprensión de los “pesos pesados” (Gasol, Rudy, Calderón…) por su suplencia en momentos clave en los juegos de Londres.
En Londres ha sido Pau Gasol quien ha tenido que tomar las riendas del equipo;  tanto dentro como fuera de la cancha. Mientras Scariolo se mostraba calmado y seguro, Pau recriminaba la “falta de concentración e intensidad” y pedía más compromiso a sus compañeros. Scariolo echaba las culpas del bajo ritmo inicial a la falta de un preparador físico en el banquillo y Pau clamaba por un cambio de actitud, imprescindible cuando el juego parecía empezar a caer en picado. Demasiada responsabilidad para un único jugador.

Resultado final. Calidad, juego agresivo, exhibicionismo; inestabilidad en el juego, equipo poco unido…El entrenador parece haberse centrado más en las tácticas y técnicas de juego a aplicar por el equipo, que en el equipo en sí.

¿Ha sido ésta la última derrota de Scariolo? ¿Derrota con sabor a victoria?

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